"JACK RYAN, OPERACIÓN SOMBRA"

Jack Ryan begins.

Si James Bond ha sido el espía del siglo XX, ha sido (aparte de todas las fantasías que concentra el personaje) concretamente por su contexto histórico, la guerra fría, que marcó la mitad del siglo pasado.

Y aunque se ha actualizado el personaje al contexto historico actual con "Casino Royale", y sobre todo "Skyfall", aun sigue siendo un espía de fronteras y enemigos identificados.

Jack Ryan también surgió en la guerra fría de la mano del gran Tom Clancy (ya fallecido) pero a diferencia de Bond, Ryan es una analista que lo mismo le da por meterse en un conflicto del IRA o contra los narcos mexicanos financiados por la CIA. El personaje representa a la integridad americana dentro de una organización, la CIA, demasiado ambigua.

Y con esta introducción entramos en el colmo de la ambigüedad dentro de la historia americana reciente: los atentados del 11-S.

Así que en estos nuevos orígenes, se enmarcan dentro de lo que representa ser un americano patriota. Es un origen patriota del personaje (Ryan se enrola en el ejercito después de ver caer las torres gemelas)

Como en Skyfall averiguamos que se cuece dentro del cerebro de una persona cuando se mete a espía, en este caso Ryan es obligado a ser un analista en parte por su accidente en el ejercito cuando estaba en Afganistán, y casualmente en su recuperación conoce a una enfermera que se convertirá en su futura esposa...

Si en anteriores películas protagonizadas por Harrison Ford el concepto de héroe se asemejaba al de Bruce Willis en "Jungla de cristal" en esta película parece un super-heroe predestinado a ejercer ese papel.

Es interesante como han enfocado el contexto geopolítico en "Jack Ryan, operación sombra" sin resultar aburrido. Ryan es como un detective que investiga lo que parece la típica mafia rusa, pero como en toda película de espías...nada es lo que parece. Si en el siglo XX la guerra fría fue una guerra silenciosa basada en la tensión de las cabezas nucleares y el telón de acero, en el siglo XXI la guerra financiera ha tomado su relevo.Otra guerra silenciosa dispuesta a estallar al primer conato de crisis.

En este thriller de espías no todo van a ser cara rusas enfadadas. Le han añadido toques de comedia al incluir el personaje de la esposa de Jack Ryan, al más puro estilo "Mentiras Arriesgadas".Así se consigue también que la esposa de Ryan,  Keira Knightley,  no sea meramente accesorio (como pasa en todas las anteriores películas del personaje)

Jack Ryan ha dejado de ser una rata de oficina que solo pelea en momentos puntuales, ahora él es que se mete de cabeza al peligro. Aunque las peleas las protagoniza un espía un poco inexperto en técnicas marciales, lo que le da un poco de humanidad al héroe de acción protagonizado por Chris Pine.

Kevin Costner se luce como secundario y Kenneth Branagh se lo pasa pipa como supervillano ruso.Tiene escenas muy tópicas pero se nota que el propio Branagh (que ha dirigido la película) ha intentado que el personaje no sea unidimensional. Se intenta indagar en la mentalidad del villano.

Jack Ryan tiene aroma de cine clásico de espías, aunque se ha rodado de una forma moderna con planos elegantes de acercamientos de cámara, una puesta en escena relajada en conversaciones y una puesta en escena nerviosa en peleas tipo Paul Greengrass. Muy nervioso.

-LO MEJOR:

-El contexto político actualizado en el que se mueve el personaje.

-Los guiños a otras sagas de espías como "El caso Bourne" "Mentiras arriesgadas" o "Misión imposible"

-La persecución final.

-LO PEOR:

-Los orígenes se han contado de una manera estupenda, esperemos que en la secuela repitan equipo y no pase como paso con Bond, un buen arranque con "Casino royale" pero tuvieron que volver a retomar los orígenes con "Skyfall".

Keira Knightley rompe el hielo (calentandolo) entre rusos y americanos.