"OCHO APELLIDOS VASCOS"

Reconciliándose con el publico.

Esta comedia no ha inventado nada nuevo. Pero su enfoque es cercano y a la vez, universal. No solo habla del amor, si no de la familia. Después, el contexto, los tópicos vasco/andaluces son una forma de reírnos de nosotros mismos, pero enmarcan la historia en un ámbito muy familiar para el espectador.

Un ejemplo: para un americano no hay algo mas familiar que ver en una película la ciudad de Nueva York, la estatua de la libertad o los campos de maíz de Kansas. "Ocho apellidos vascos" tira de tópicos pero funciona: chico conoce a chica, se pelean y se enamoran. Un protagonista bobalicón y una chica arisca, es una comedia blanca y blanda, pero tocando temas que nunca se han tocado,  y algo más light en otros aspectos que el resto de comedias españolas de sal gruesa que se han dirigido al publico adolescente en los últimos tiempos.

Es una película para todos los públicos. Puede que no sea arte, pero el cine también es un negocio y si todo el mundo puede verlo, cuanta más gente mejor.

Uno de los aspectos más notables en en "8 apellidos vascos" es la empatía con el protagonista, es tan simpático que hace que el espectador o se identifique con él o le de pena, y se preocupe por sus andanzas, sus aventuras, desventuras, malentendidos, y demás berenjenales en los que se mete. 

Un sentido del ritmo narrativo ,un timing increíble y sobre todo un referencias familiares dentro del genero de la comedia, desde "Los padres de ella" hasta "Bienvenidos al norte".

-LO MEJOR:

-Machi, Dani Rovira y Karra Errejalde, Goyas todos merecidisimos y aunque salgan poco, los secundarios sevillanos y vascos.

-Los gags surralistas.

-Su sentido del ritmo.

-El monologo en la iglesia en plano secuencia. 

-LO PEOR:

- Dejarse llevar precisamente, por los tópicos, a la hora de ver "Ocho apellidos vascos"